Ha sido muy comentado en la ciudad que sólo se haya presentado una empresa para realizar esta obra presupuestada en 4.377.038, 7€ que el equipo de gobierno quiere pagar con suelo municipal valorado en 7.594.745€.
La valoración que de este hecho ha realizado el alcalde es que no ha habido más licitadores debido a la alta clasificación exigida a las empresas. Al parecer, el PP piensa que las empresas españolas, que participan en las obras más complicadas del mundo, se han asustado por la complejidad de hacer un puente sobre nuestro modesto Arlanzón. Al Alcalde se le acaban los argumentos y cada vez recurre a discursos más peregrinos.
Ciertamente, cuando ha disminuido sensiblemente la cartera de pedidos de las empresas constructoras es motivo de reflexión que a esta obra concurra un solo licitador cuando en otras licitaciones menos importantes acuden 10 o más empresas.
Descartada la absurda argumentación del PP se me ocurren tres motivos por los que las constructoras no han participado en esta licitación.
El primero es porque el pliego no reúne las suficientes garantías de que el concurso va a ser resuelto con objetividad a la oferta más ventajosa para la ciudad.
El segundo es que, regidos por una elemental prudencia, nadie se quiera meter en una obra cuya licitación puede ser considerada ilegal por ser pagada la inversión con suelo integrante del patrimonio municipal del suelo contraviniendo la legislación urbanística conforme ha sido reiteradamente declarado en diferentes sentencias.
El tercero es que el proyecto no infunda la confianza técnica suficiente para poder ser ejecutado según sus previsiones.
Desconozco si este tercer argumento es consistente pero lo que sí es seguro es que concurren los dos primeros motivos por lo que es razonable que ninguna empresa se quiera meter en esta aventura.
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